Ahora el verano es tiempo de bordado. Es la estacion del año en la que más luz hay y que aprovecho para acabar trabajos finos que llevan mucho detalle y que requieren más precisión en la vista.
Por otro lado, es en la que hace más calor y apetece hacer cosas pequeñitas que no sumen calor a las altas temperaturas que nos acompañan.
Este verano me he hecho una guarda bastidor, que me está resultando de lo más útil para guardar y transportar mis bordados. Puedes guardar también los hilos y la aguja. Es de tamaño pequeño por lo que entra en cualquier bolso.
El diseño es de Valérie Caterin del libro «L’atelier de Lili» y se combinan técnicas de patchwork, costura y bordado.
Es ideal para guardar tus labores de bordado o de punto de cruz. El tamaño, pues cada una se lo puede hacer en función de los bastidores que más utilice, a mi personalmente me gustan pequeños, pues son más manejables y se pueden llevar a todas partes, en el bolso o en la cesta de la piscina.
La cremallera queda en horizontal pero es muy cómoda, no resulta nada molesta siempre y cuando el bastidor no sea muy grande y quede muy ajustado.
Bueno, espero que os guste y pronto os enseñaré más cositas, que ahora en Julio tengo más tiempo. Un abrazo y happy quilting!